Más del 62% la población tenemos (o hemos tenido) manchas en la piel y tratamos de borrarlas o, al menos, mejorarlas. Tras el verano, nuestra dermatóloga, la doctora Arantxa Arana (*), nos da la guía definitiva para tratar las manchas en la piel
Las manchas forman parte de los malos recuerdos de las vacaciones, pero no sólo eso: puede haber más causas que la exposición solar.
Las manchas marrones son causadas, normalmente, por la radiación solar, pero también pueden ser causadas por ciertos tratamientos estrogénicos (pastillas, tratamientos para la menopausia), medicamentos (antidepresivos, antibióticos, antiinflamatorios), embarazo o, simplemente, un envejecimiento natural de la piel. Hacerlas desaparecer, o incluso difuminarlas, puede ser difícil, pero no imposible.
Cómo tratar las manchas de la piel
Afortunadamente, existen tratamientos y principios activos eficaces para tratar las manchas en la piel, previniendo la aparición de nuevas manchas y atenuando las ya presentes.
Y qué mejor época que el otoño para ponerse manos a la obra.
Antitirosinasa para quitar manchas
La tirosinasa, una enzima involucrada en la producción de melanina, a veces puede volverse demasiado ‘entusiasta’ y producirla al azar. Una disfunción que es la responsable de la aparición de las famosas manchas. Por ello se han desarrollado activos para reducir su producción:
- Hidroquinona: esta molécula química, conocida desde los años 60, es tan “terriblemente” eficaz que puede provocar una despigmentación irreversible. Por tanto, está prohibido en cosmética y sólo pueden utilizarlo y pautarlo los dermatólogos.
- Arbutina: extraída de las hojas de la gayuba, un arbusto que crece en regiones alrededor del círculo polar, que inhibe eficazmente la actividad de la tirosinasa y ayuda a descomponer la melanina (y por tanto a eliminarla más rápidamente). Se suele combinar con vitamina C, PP o ácido glicirretínico (extraído de las raíces de regaliz), un buen antiinflamatorio para mejorar su eficacia en dosis más bajas.
- Ácido kógico: derivado del moho del hongo, es lo que llamamos un kelator, un ingrediente activo que bloquea dos átomos de cobre dentro de la tirosinasa, impidiéndole hacer su trabajo. ¿Una advertencia? Puede resultar un poco irritante porque para actuar eficazmente debe asociarse en las fórmulas con ácido glicólico, que puede descamar la piel.
- Ácido dioico: actúa sobre uno de los genes de la tirosinasa. No sólo impide que actúe, sino que también ralentiza la distribución de la melanina hacia el estrato córneo y por tanto su acumulación en las manchas pigmentarias.
- Glabridina: este extracto de regaliz, planta conocida por sus efectos aclarantes, inhibe la melanogénesis.
Antirradicales libres para prevenir las manchas marrones
Cuando nuestra piel está expuesta a los rayos UV o a la contaminación, es invadida por radicales libres que oxidan nuestras células y debilitan nuestra epidermis, provocando la aparición de arrugas y manchas marrones en el proceso.
Ahora bien, la mayoría de los antirradicales libres utilizados en cosmética provienen de frutas o verduras, que también deben protegerse de la radiación solar. Se recomiendan incorporar los siguientes antioxidantes.
- Vitamina C: es uno de los mejores captadores de radicales libres (que al mismo tiempo regula la actividad de los melanocitos). Ojo, puede resultar un poco irritante si su pH es ácido, de ahí el interés de combinarlo con activos antiinflamatorios.
- Vitamina E o tocoferol: procedente de aceites y semillas oleaginosas, actúa en sinergia con la vitamina C, el betacaroteno y el selenio protegiendo las membranas celulares.
- Polifenoles: presentes en las plantas, especialmente en frutas y verduras, estos micronutrientes tienen poderes antioxidantes muy eficaces.
Peelings médicos antimanchas
Aceleran la renovación celular para ahuyentar los queratinocitos oscurecidos y permiten una mejor penetración de los activos despigmentantes.
Estos últimos contienen, en su mayor parte, alfa hidroxiácidos, más conocidos con el nombre de AHA. Procedentes de los azúcares de las frutas (ácido glicólico), de la leche (ácido láctico), de las manzanas, del limón y de las uvas.
Estos ácidos también tienen la capacidad de estimular la síntesis de colágeno y elastina y de reducir las manchas pigmentarias. Además, el ácido azelaico, compuesto a partir de cereales (trigo, cebada o centeno), tiene la ventaja de ser ligeramente queratolítico (descama y elimina la capa de queratina de la piel) pero también antibacteriano. Recomendado, sobre todo, para pieles con tendencia acneica.
Para las manchas, se recomienda el Melaspeel y melases TRX. Son peelings que contienen agentes específicos despigmentantes, por lo que se utilizan para hiperpigmentaciones o manchas localizadas.
Se suelen realizar 6-8 sesiones espaciadas cada 3-4 semanas. De mantenimiento se utilizan cada 2 meses. Además, también se suelen realizar peelings médicos a base de ácido glicólico.
Eso sí, la concentración varía del 20 al 70%, las sesiones se separan un mes y generalmente se hacen 4-6 sesiones. Las indicaciones son melasma, hiperpigmentación postinflamatoria, acné y fotoenvejecimiento leve.
Otro muy solicitado en nuestra clínica es el tratamiento con ácido salicílico (salipeel). Su concentración varía entre 20-30% y se realizan sesiones mensuales hasta 3-5 sesiones. Las indicaciones más utilizadas serían el acné, melasma, hiperpigmentación postinflamatoria, piel con poro abierto, fotoenvejecimiento medio a moderado. Son muy seguros en cualquier fototipo, también en los oscuros al no inducir hiperpigmentación postinflamatoria.
Láser Q-switched, el aliado perfecto de las manchas
Los tratamientos láser eliminan lentigos solares y, a veces, son buen complemento para el tratamiento del melasma.
Los láseres más eficaces para tratar lesiones pigmentadas son los que llamamos Q-switched, pues emiten pulsos de alta energía, pero muy cortos, dando lugar a una ruptura de la melanina sin dañar la piel de alrededor sana.
En general los resultados son muy buenos desde la primera sesión, aunque hay casos más complicados que requieren más sesiones y más tiempo, pudiendo necesitar 2-5 sesiones espaciadas por 1-2 meses.
Luz Pulsada (IPL), el tratamiento definitivo para tratar las manchas
La luz pulsada o IPL es conocida por el gran público, pero sigue siendo enigmática para muchos.
Conocida por la depilación permanente, también tiene virtudes sobre la piel, como tratamiento rejuvenecedor y poderoso antimanchas. Es un tratamiento muy utilizado cuando además hay lesiones vasculares asociadas y se desea mejorar la calidad de la piel en general.
La IPL emite un haz de luz no invasivo e indoloro que se enfoca en las líneas finas y las arrugas, así como en las manchas. Engrosa significativamente la piel al obligar a las células de fibroblastos, especialmente al colágeno, a regenerarse. Estos juegan un papel importante en el proceso de reparación de los tejidos.
Por lo tanto, la Luz Pulsada o IPL previene el envejecimiento, mejora la elasticidad y el tono de la piel, al tiempo que reduce las imperfecciones (poros dilatados, puntos negros, lesiones vasculares, manchas). Se puede realizar en diferentes zonas, como el rostro, el cuello y el escote e, incluso, las manos.
Se recomiendan 2-3 sesiones el primer año, y posteriormente una sesión anual de mantenimiento. Las sesiones pueden realizarse cada 3-4 semanas. Es ideal como tratamiento post-verano.
Para tratar las manchas de la piel, acude a nuestra clínica. Valoraremos tu caso de forma personalizada y así podremos determinar el mejor tratamiento para tu caso.
(*) La doctora Arantxa Arana Raja, especialista en dermatología estética en la Clínica Doctora Pérez Sevilla.