Las arrugas en la frente y en el entrecejo son motivo de muchas consultas, ya que son muy visibles y, además, le dan al rostro un aspecto de enfado, tristeza, preocupación… Al tratarse de arrugas de expresión, pueden aparecer a edades muy tempranas en personas que gesticulan mucho, también en pieles poco cuidadas.
La periodista Ores Lario cuenta con mi opinión en este artículo de Vanity Fair para ofrecer los mejores consejos con el objetivo de evitarlas. Entre ellos aconsejo masajear los músculos, un gesto que nos ayuda a relajarnos y mejorar la microcirculación de la zona, protegiendo así el deterioro de la piel.
Cuando las arrugas ya se han instalado habrá que recurrir a la medicina estética para mitigarlas. Los mejores tratamientos son la toxina botulínica, que relaja las fibras musculares, evitando la excesiva contracción de los músculos, y el relleno de ácido hialurónico que atenúa las arrugas y restituye la calidad de la piel. Son tratamientos temporales que deberemos repetir 1-2 veces al año para mantener sus resultados.
Aquí os dejo enlace al artículo completo en Vanity Fair