En general, cuidamos más la piel del rostro, porque es la más visible, y en cambio nos olvidamos de dos zonas esenciales: el cuello y el escote.
En este tema, la periodista Ángela F. Del Río cuenta con mi opinión para hablar de cómo envejecen estas zonas y cómo deberíamos cuidarlas.
El escote tiene una piel muy fina y su ubicación, la hace muy susceptible de sufrir los daños solares. El cuello también tiene características particulares por las estructuras musculares. Por ello en nuestra clínica hemos desarrollado un protocolo específico para devolver la juventud a esta piel.
El láser CO2, reafirmante y estimulante del colágeno, es una ayuda esencial para rejuvenecer cuello y escote, como también lo es la aplicación del láser Q Switch para eliminar las manchas, el drenaje linfático asistido con cosméticos drenantes, las inyecciones con vitaminas, antioxidantes, ácido hialurónico y silicio, y el uso de un sujetador antiarrugas para evitar las arrugas que se forman al dormir.
Aquí os dejo enlace al artículo completo en Marie Claire